Victoria viaja, sonríe y suma: todo sirve para su proyecto

La vicepresidenta vuelve a Chubut para mostrarse con Ignacio Torres y sigue su ronda de fotos con gobernadores de todos los colores. Mientras Milei se consume en conflictos, Villarruel arma su propio tablero: ¿paciencia para 2027 o apuro para antes?

Actualidad20/08/2025
NOTA 2

En silencio, viendo a Milei pelear

 

Victoria Villarruel viajará a Río Mayo, Chubut, para festejar los 90 años de la localidad donde pasó parte de su infancia. Un acto que en el manual de la política parece inocuo, pero en realidad dice mucho: no hay viaje casual cuando la vice se saca fotos con un gobernador PRO como Ignacio Torres. Cada provincia es una escala en su construcción de poder, ese que Javier Milei prefiere dinamitar a fuerza de insultos y purgas.

El contraste es brutal. Mientras el presidente vive en guerra abierta con gobernadores, bloques legislativos y hasta con parte de su propio espacio, Villarruel aparece relajada, sonriente, cortando cintas y aceptando invitaciones de mandatarios que el mileísmo ya expulsó de su círculo. La vice no hace asco: suma peronistas no K, radicales sueltos y dirigentes amarillos que prefieren la foto con ella antes que la hoguera de Milei.

 

La sombra que crece

En la rosca libertaria nadie lo dice en voz alta, pero lo piensan: Villarruel es la única que puede heredar lo que Milei va dejando hecho cenizas. Con un estilo menos explosivo y más paciente, recorre provincias y cosecha vínculos. Su presencia en Chubut refuerza su línea: mostrarse como alternativa de gestión, más preocupada por sumar que por gritar.

Ignacio Torres, que amagó con una alianza con La Libertad Avanza y luego se desmarcó, es un buen ejemplo de ese juego. La vice lo abraza igual: sabe que en la política lo importante no es la pureza, sino los números que lográs acumular. En un escenario de debilidad presidencial, la vice aparece como la figura que no expulsa, sino que incluye.

 

¿2027 o antes?

La pregunta que recorre pasillos y sobremesas es simple: ¿Villarruel está jugando para dentro de dos años o para mucho antes? El desgaste de Milei, acelerado por su propio estilo de demolición, abre un escenario en el que la vice podría quedar como plan B presidencial. Ella no lo dice, apenas sonríe y suma. Su rol de presidenta del Senado la mantiene en la foto institucional, pero su agenda federal la pone en un plano político propio.

Cada viaje, cada gobernador, cada foto construye una base transversal que Milei nunca intentó tejer. Y mientras el presidente se queda sin interlocutores, Villarruel logra algo raro en la política argentina: que todos, de un lado y del otro, vean en ella una posibilidad.

En la política, a veces, la mejor jugada es dejar que el otro se desgaste. Milei quema capital como quien prende un papel, rápido y sin medir el humo. Villarruel, en cambio, viaja, escucha, sonríe y acumula. Y en ese silencio paciente, la vice se convierte en la sombra más peligrosa del presidente: la que crece sin hacer ruido.

Te puede interesar
NOTA UNICA

La trama oculta detrás del acuerdo entre Puma e Independiente

Actualidad06/10/2025

Después de varias idas y vueltas, el club de Avellaneda decidió prolongar el acuerdo con la firma alemana y darle la negativa al que iba a ser el nuevo sponsor. La marcha de los hinchas, una dirigencia que perdió el crédito y un llamado que terminó por inclinar la balanza hacia el mismo sponsor del Rojo de los últimos 15 años.

Lo más visto